Bueno ya estamos como
todos los años por estas fechas con
comidas por doquier y celebraciones interminables, compromisos sociales
de trabajo, familiares, amigos y todos en torno a una mesa llena de comida,
como si en todo el año no
comiéramos, pero con un poco de estrategia podemos salir airosos de estas
fiestas disfrutando y sin almacenar demasiados kilos.
Para ello hay que ser
un tanto prudentes y no hacer el equívoco de pensar:
“Como todo lo
que me apetece y después de las Fiestas de Navidad ya hago los buenos
propósitos de ponerme a régimen”.
¿Qué
podemos hacer?
Si somos nosotros los
anfitriones de la comida o cena podemos optar por incluir en el menú como entrantes;
verduras, hortalizas y frutas que con recetas originales son saciantes,
equilibrados y con pocas kilocalorías. Los segundos platos son una buena
opción: los asados con pocos condimentos y aceites, también los alimentos guisados al
horno, el típico pavo o el pollo, el cordero sin exceso de ingredientes,
cocinados lo más sencillamente posible, se les puede añadir para su cocción
caldos de verduras que dan muy buen sabor, también especias y por supuesto el
ajo y la cebolla que aportan buenas propiedades nutricionales al plato, así
como sabor. Los pescados son una muy buena elección, sobre todo para la cena ya
que son de más fácil digestión que las carnes. Así atún, lubina, merluza o salmón, entre otros, tanto
en guiso como asados o al horno, son platos saludables. Los postres lo mejor es
recurrir a la piña o frutas tropicales por aquello de que queda más original,
pero cualquier fruta es buena, mejor que postres elaborados, luego ya vendrán la
variedad de dulces que nos invaden estos días.
En el caso que vayamos
a mesa servida, lo primero es no llegar con exceso de apetito, es decir porqué
vayamos a hacer una cena copiosa o una comida no se trata de estar todo el día sin
comer. Sino acabaremos comiendo bastante más por el apetito acumulado. Por
tanto si es el caso de Nochebuena, por ejemplo, durante el día mejor tomar solo
ensaladas sencillas, caldos claritos de verduras, verduras asadas o estofadas y
frutas.
Hay que procurar no
picar en exceso, y tomar más cantidad del plato principal, los dulces tomarlos
con mesura y en el caso de las bebidas alcohólicas, si no se evitan, decantarse
más por las fermentadas como vinos, cavas, champagne, estos últimos mejor optar
por los bruts nature ya que no tienen nada de contenido en azúcares libres. Tratar
de evitar las bebidas alcohólicas
destiladas tipo licores, ginebra, ron, etc. Porque además de tener una alta
graduación alcohólica con lo cual tenemos más aporte kilocalórico, tienen un
alto contenido en azúcares libres. Es importante, comer despacio, masticar y
disfrutar de la comida sin engullir, ésto ayuda a comer menos cantidad, beber agua y tratar de andar o hacer algo de ejercicio, es un buen
aliado para mantener a raya esos kilos.
Entre las fiestas de
Navidad, la de Año Nuevo y Reyes es
conveniente al menos hacer un día o dos a base de frutas, verduras, caldos
ligeros e infusiones. Los otros días comer de forma equilibrada basada en la
dieta mediterránea sin exceso de azúcares añadidos, ni grasas.
Con estos pequeños
consejos espero disfrutéis de estas fiestas en buena compañía y en un ambiente
distendido y amigable que es muy importante para mantener una buena salud
física y psíquica
"¿Por qué no seguir pensando que con amor se puede cambiar el mundo"
FELICES FIESTAS
Dra. Mª Teresa Lluch
Armell