martes, 31 de agosto de 2021

DIETA KETO Sí, DIETA KETO NO

 

        Las dietas de moda para adelgazar siguen y siguen, aunque se sabe sobradamente lo poco saludables  que son y la ineficacia de éstas a largo plazo, siempre salta una u otra al candelero con la indudable pretensión de jugar con la ilusión de las personas que ansían perder peso de la forma más fácil y rápida posible. Y aunque se sabe sobradamente que los milagros no existen, siguen calando en la población sobre todo apoyadas por lo gurúsmediáticos(influencers) y seudoprofesionales de la salud que las apoyan y, de esta forma promocionan con ello la venta de productos de empresas que las promueven, aprovechando la demanda de mercado.

Ahora le ha tocado el pódium a la dieta Keto, que no tiene nada de novedosa y, no deja de ser más que nada una dieta cetogénica basada en la antigua del doctor Atkins, creada por este cardiólogo en el año 1960. Esta seria otra dieta más, sacada del contexto en donde realmente es adecuado utilizarla, como es en este caso, para el tratamiento de la epilepsia.

¿En qué consiste la dieta Keto? Es un tipo de dieta que disminuye el aporte de hidratos de carbono a un 10% de la ingesta kilocalóríca total, siendo lo recomendable en una dieta equilibra entre un 50 y 55%, esta bajada se hace a expensas del aumento de grasas a un 60, 70%, del 30% recomendado y de las proteínas a un 20, 30% con respecto al 10, 15% recomendado. Un tanto despropósito. El fin con el que se trabaja con estos porcentajes es porque: la principal fuente energética que utiliza el organismo proviene de los hidratos de carbono, metabolizándolos a través de los que se denomina glucolisis. Al disminuir tanto éstos y el organismo no poder obtener energía suficiente a partir de ellos, empieza a obtenerla mediante una vía alternativa y que se utiliza principalmente en situaciones de ayuno y hambruna, que consiste en metabolizar las grasas disponibles mediante la ruta metabólica de los cuerpos cetónicos.

Es decir que ante la falta del combustible principal que es la glucosa, el organismo toma una vía alternativa de supervivencia, y si bien esto es muy útil en situaciones extremas, no es adecuado en periodos largos.

¿Por qué adelgaza? Debido a que el organismo consume más energía para quemar grasas vía cuerpos cetónicos que para quemar hidratos de carbono mediante la glucolisis. Por otro lado, cuando el cuerpo entra en cetosis en realidad enferma, por ello duele la cabeza, no se tiene hambre, da estreñimiento, entre otros efectos, lo que también lleva a un adelgazamiento implícito. Un ejemplo al respecto es el caso de la diabetes no tratada, al no reconocer el organismo la presencia de glucosa en sangre degrada grasas vía cetogénica con la consiguiente formación de cuerpos cetónicos y aparición de cetosis.

Los defensores de esta dieta consideran que es beneficiosa tanto si se pierde peso como no, para la diabetes, ciertos canceres, Alzheimer, propiedades antiedad entre otras. Pero la realidad es que no hay evidencia científica que avale estos supuestos beneficios excepto para tratar la epilepsia refractaria y en algunas enfermedades neurológicas.

¿Qué alimentos se dejan de comer en esta dieta? Frutas, verduras, cereales, legumbres, hortalizas, todos aquellos alimentos buena fuente de carbohidratos. Por ello es una dieta muy restrictiva que no promueve hábitos alimentarios saludables.

Pero la realidad es que la dieta Keto para adelgazar no es una buena solución ya que al final da más problemas, que beneficios, sobre todo a largo plazo. Mientras se está en cetosis los síntomas que se presentan son: dolores de cabeza, náuseas, halitosis, cansancio, sudor y orina de olor fuerte, pérdida de calcio, de masa ósea(osteopenia) y músculo(sarcopenia) y se corre el riego de desarrollar cetoacidosis que es una acidificación del PH de la sangre, lo que puede llevar graves problemas para la salud e incluso conducir a la muerte a personas con problemas hepáticos y renales.

También provoca carencia de vitaminas y minerales, aumento de ácido úrico, posible gota, aumento de colesterol y a la larga problemas renales y hepáticos.

En definitiva: la dieta keto si bien es una dieta que puede proporcionar un adelgazamiento rápido, necesita estar muy supervisada y los posibles beneficios son muy pocos, comparados con los riesgos que se corren. Su seguimiento a largo plazo además de lo comentado anteriormente puede provocar trastornos alimentarios (trastorno por atracón) y lo que se conoce como fobia a la ingesta de hidratos de carbono y no educa en hábitos alimentarios saludables, con lo que el efecto yo-yo está servido.

 "Ver más allá de lo que se ve"

Dra. Mª Teresa Lluch Armell